lunes, 27 de abril de 2009

Antologia de un secuestro

Detrás de la barra del bar todo se ve distinto, deben ser los efluvios del alcohol, la bayeta vileda, los hielos humeantes, la excitación de estar al acecho... Mi único contacto tras la barra fue durante la carrera, en las llamadas "fiestas del paso del Ecuador". Esas fiestas en las que ingresos y gastos se equiparaban, y que para lo único que servían era para pillarnos un pedal del quince.
Recuerdo que cuando me toco el turno, cada vez que me confundía al servir una copa, y ponía whisky donde debía poner ron, yo me la guardaba y si en cinco minutos no podía endosársela a nadie me la pimpaba, así que según Numbers ello tenía una reflexión matemática como la siguiente:

Axioma: Sirvo copa, me equivoco, me la guardo, no la vendo me la pimpo…
Velocidad: Cuanto mas pimpo mas me equivoco ergo mas pimpo…
Causa: No existen marcas de bebidas distintas solo colores de alcohol distintos, además los clientes con el alcohol no vocalizan, los camareros se fijan demasiado en los escotes de las chicas, nunca hay suficiente hielo en la cubitera…
Efecto: En esas fiestas los camareros son los más borrachos de la fiesta...

Este finde vivi otra experiencia al juntarse dos fenómenos particulares:
-uno conocido, los viernes bebemos mas de lo que deberíamos
-los camareros deben quedarse detrás de la barra.
Por separado esto no es un gran problema, Juntándolos te encuentras en una situación como la nuestra este viernes, enfrascados en una conversación absurda con los dueños de un bar.
De tres camareros que eran yo ya veía a seis, hasta ahí mi grado de lucidez. Además la conversación a entablar no tenía ni pies ni cabeza…
Nos queríamos ir pero nos enganchaban con un "además Zapatero tal y cual", y zas de vuelta a la absurdidad de la conversación. En todo momento mis ojos no se centraban en nada, un amigo golpeando la pierna de polaris pidiendole que corriera, mientras le iba ganando centimetros a la salida…al final, resolvimos, un cortante hasta luego, carrera y a la calle!!! Estabamos salvados.

Moraleja: En un bar esta terminantemente prohibido hablar de nada concreto durante mas de cinco minutos, mi consejo es que deis un sorbo y cambiéis de conversación y again again, sino correréis el riesgo de ser kidnapped!!!

jueves, 23 de abril de 2009

Mundo Viejuno

Me duele decirlo, pero me hago viejo con la edad, y eso que intento mantenerme en forma pero no hay semana en la que, tras hacer deporte, me sienta como Indiana Jones en su primera película. Al día siguiente de hacer ejercicio físico, me encuentro hecho una piltrafilla total. Es en esos momentos cuando me viene a la mente la escena del primer Indy en el barco Bantu Wind. “Un Indiana hecho polvo y gruñón, justificándole a Marion que esta acabado no por la edad sino por el rodaje”, aunque reconozcámoslo Indy, en la calavera de cristal estas ya para el arrastre.

Otro de los efectos nocivos de la edad es la falta de sueño, dormir menos horas de las habituales es en algunos casos hasta bueno. Pero en mi caso es un inconveniente. Me fastidia enormemente despertarme antes de que suene el maldito despertador, y últimamente estoy que me salgo.

Al principio eran cinco o diez minutos, pero ahora es media hora o cuarenta minutos antes. Esto hace que me sea imposible retomar el sueño, y eso me jod.. me jod… una barbaridad, no sabéis los sueños tan geniales que tengo…si no se me olvidaran al despertarme los compartiría. Tengo que empezar a tomar medidas, no para recordar los sueños sino para entrar en vela. Lo mejor será esconder el despertador de mi vista y dejar que su alarma me despierte.
Con suerte siempre me quedara tiempo para introducir 4, 8, 15, 16, 23 y 42 y evitar que esta maldita isla vuele por los aires.

miércoles, 15 de abril de 2009

Japón-2: Planificación del viaje

Ante todo tenemos que tener en cuenta que queremos ver una vez allí.

La respuesta en nuestro caso fue todo, todo, todo…el problema es que tendremos únicamente 15 días para hacerlo…demasiado poco.
Afortunadamente para nuestros fines estaremos en el país tecnológicamente más avanzado del mundo, con lo cual podemos aprovechar tanto sus dos aeropuertos como sus rápidisimos trenes bala.

Hemos optado por entrar a Japón por Osaka y salir por Narita. De esta forma nos moveremos entre las dos grandes ciudades Kioto y Tokio. Aprovecharemos el tren bala para visitar otras ciudades no menos importantes como Nara, Kobe, Hakone, Tokohama, Nagoya… pero siempre haciendo noche en Kioto/Tokio. De esta forma tendremos la posibilidad de ver todas las ciudades de Japón en menos de dos semanas. Nuestra idea es pasar al menos tres días completos o más en Tokio, y dos en Kioto.

En Japón para facilitar el transporte de los turistas tienen, lo que ellos llaman el Japan Rail Pass, un bono que durante un tiempo determinado (7, 14 y 30 días) permite viajar en todos los trenes y transportes de la empresa J.R. Este bono se adquiere únicamente fuera de Japón y se activa el primer día de uso y disfrute real del tren.

Con la planificación anterior nos hicimos un calendario con las ciudades donde queríamos dormir y nos fuimos a agencias de viaje a consultar precios y disponibilidades.

En concreto nosotros miramos una agencia grande como la de El Corte Ingles, una agencia especializada Jaltours y una agencia familiar Viajes Campa.
En la primera fue prácticamente imposible hacer algo a la carta. y prácticamente te dan lo que el mayorista contratado (catar o similar) les impone, eso sí precios made in El Corte Inglés. Pese a que pusimos la lista de bodas con ellos contando con el viaje, al salir de la agencia de viajes nos miramos, Polaris y yo, y dijimos…”como todos los precios sean así… la luna de miel será en Teruel o Aranjuez.”

Jaltours es una agencia especializada en el país nipón donde puedes personalizar absolutamente todo el viaje, además saben mucho de Japón, donde alojarse, transporte, viajes organizados, tours, manutención…os la aconsejo para curiosear. El pero es que esa personalización tiene un precio, pero como referencia para saber más es la mejor. De esta agencia sacamos mucha información para después ir a otras agencias.
Hay que decir que a veces en la agencia de confianza no siempre aciertas, pero este no fue el caso y como es familia también fue donde vimos los márgenes en los que se mueven las agencias de viajes.
Lo que llama la atención entre agencia es la variedad de precios en los vuelos, ¿cómo es posible que el mismo vuelo tenga precios distintos?
Recuerdo que en Jaltour nos decían:
“son tantos euros el vuelo más las tasas, y éstas pueden variar de 60 euros a 400”.
…a lo que nosotros respondíamos…“perdón”
“es por la fluctuación del yen con el dólar, y por el precio del combustible…”

perdón”, estuvimos a punto de decirle “¿y si el viento es de cola nos hace descuento? ¿y sí el peso que lleve el avión fluctúa, porque si vamos todos españoles o todos japoneses…pesaremos distinto verdad?”
....en fin

A Japón no hay vuelos directos, y todos hacen escala, las principales compañías que vuelan son British Airways, Japal y Finnair. Nosotros iremos con esta última.

Para los hoteles en la agencia nos pasaron una lista con precios y nombres, y a partir de ahí nosotros seleccionamos. En Japón hay millones de hoteles, yo diría el triple que en España, todos con sus particularidades. Lo más llamativo los hoteles capsula, modelo “tipo nicho” para que nos entendamos, y también son curiosas las habitaciones semi, es decir, una habitación pequeñita con cama de 90 y paredes a 30 cm alrededor.
En Japón para los europeos existe el problema del idioma, con lo cual no hay Diox que ubique nada en los mapas, a menos que sepas interpretar los kanjis.
Así al elegir hotel en el goggle maps no éramos capaces de decidir cual era mas aconsejable. Todo parecía igual, y al ubicarlos en las ciudades, como éstas están tan pobladas, es muy complicado saber cual es realmente el centro de ellas. Tokio por ejemplo tienen mas de siete centros distintos.
Nosotros al final iremos al Hearton Hotel en Kioto, y espero que no me dirijan al Hilton hotel, por el tema de la no pronunciación de la R y nos salga el viaje en un pico.
En Tokio estaremos en el Chisun Inn en Asakusa un barrio típico japonés lleno de templos. Y el último día en el International Hotel de Narita, cerca del aeropuerto.

No podemos ir a Japón sin probar un hotel típico o Ryokan, con habitaciones separadas por biombos y futones en el suelo. Por ello estaremos en el Hotel Okuyumoto en la ciudad de Hakone, cerca del monte Fuji. Este Ryokan también tiene baños termales típicos japoneses u Onsen, así que ese día será de completo relax.

En próximos post: Japón-3: Que esperamos ver