viernes, 26 de diciembre de 2008

Los pitufos negros

Tras mi maltrecho post de hace unas semanas un amigo me comento, tras criticarme por confundir el autor de la introducción de Walking dead Simon Pegg, me comento que una de las primeras introducciones de la temática zombie fue en un tebeo de los pitufos.
Reflexionando sobre el tema me di cuenta que la primera vez que leí una obra con zombies de protagonistas fue en los pitufos negros.

Si recordais en dicho comic una mosca Bzz, infectaba a un pitufo volviéndolo color negro, loco por morder pitufos y quedando su vocabulario limitado a la sola palabra "ÑAC".

El pitufo negro se dedica a morder las colas de los demás pitufos, que se vuelven negros al instante y a su vez van mordiendo a otros pitufos, Pronto, todos en la aldea se han vuelto pitufos negros; mientras, el salvador

Papá pitufo intenta encontrar una cura y poner fin a la epidemia.


Es curioso que no pensara antes en este tebeo, seguro que encontráis multitud de similitudes con las películas con protas zombies…

La duda que se plantea es: si este cómic fue publicado en 1963, es decir, cinco años antes del estreno de la Noche de los Muertos Vivientes, ¿es posible qué Romero plagiara un tebeo, sobre enanitos azules que viven en setas, para realizar una de las películas de terror más efectivas de la historia?

lunes, 15 de diciembre de 2008

Una de muertos vivientes…

Últimamente no dejo de ver contenido zombie, me atrae este tipo de cine, supongo que se debe a la tremenda fuerza visual que desprenden, me encantan las escenas de ciudades desiertas, paisaje apocalípticos, imágenes desoladores que sobrecogen.

Así en estos días navideños a la lectura del comic “Muertos vivientes” hay que añadirle el visionado (vaya palabreja) de todas las películas de zombies que pasan por mis manos, “La tierra de los muertos vivientes”, “Dawn of the death”, secuelas de Residente Evil, “28 días” y demás…

La ultima ha sido la serie de la BBC “Dead set” recomendada por un amigo. “Dead Set” es una impresionante miniserie de 5 capítulos, calca en parte el argumento de 28 días pero contando como escenario la casa de gran hermano. Todo acontece mientras los componentes del GH inglés están concursando. Si eres un fan de GH ingles encontraras que los presentadores, concursantes…etc. son un calco (algunos reales) del ultimo gran hermano.


Después de esta pequeña introducción la reflexión que me hago es: qué les pasa a los guionistas, por qué todas las películas de zombies, amén de compartir un mismo argumento (te mueres y resucitas convertido en un animal de bellota hambriento de carne humana) no se comen mas el tarro y diseñan una película más abierta.
Son pocas o ninguna las veces que he visto un film que me sorprenda, todo se resume en viven y escapan al punto geográfico X o mueren comidos y forman parte del mundo zombie. Por qué no nos sorprenden de otra forma…por qué no un desarrollo argumental más largo, en el que toda la película no sea correr, correr y morir.

Sólo pido que le echéis un vistazo a “Dead Walking” de Robert Kirkman para que comprendáis a lo que me refiero. Como mas o menos nos cuenta el autor en el primer volumen “

“Las buenas películas de zombies nos demuestran lo fastidiados que estamos, nos hacen reflexionar sobre nuestra posición en la sociedad... Y sobre la posición de nuestra sociedad en el mundo"

viernes, 5 de diciembre de 2008

La vuelta a casa

No os habéis preguntado porque siempre que vuelves de un viaje largo te tiene que pasar algo…

De vuelta de Amsterdam tras recoger nuestras maletas, la primera en la frente…la auxiliar de seguridad se fija en nosotros y nos realiza un control de maletas rutinario, resultado cinco minutos perdidos.

Vamos a la zona de taxis para regresar a casa desde el aeropuerto, un trayecto de más o menos 25 euros y no mas de 20 kilómetros.
El taxista nos pregunta por donde voy, y le decimos unas breves señas
(mal hecho deberíamos pedirle que pusiera la dirección en el TOMTOM y que siguiera las flechas)

Pero el energúmeno con gafas de culo de vaso, gorro bohemio y metro noventa (que conducía un SKODA OCTAVIA TDI) se desvía por la M-40 y nos lleva a una rotonda, de esas abandonadas, sin edificios alrededor. Segunda en la frente.

Después ni corto ni perezoso se vuelve a incorporar a la M-40, Polaris le pregunta…”¿por qué nos ha llevado por ahí?” A lo que el subnormal profundo (si lees esto quedamos en Moratalaz) le responde “¿es que la M-40 esta cortada?” Nos quedamos perplejos y le decimos ¿desde cuando, qué nos hemos perdido en estos cuatro días?
al final nos dice…”es que me he perdido”.
Le indicamos el camino de nuevo y se confunde otra vez, se lo decimos y nos dice todo chulo, “por donde vosotros decís no hay salida a vuestra zona”
Lógicamente a Polaris se le hinchan todas las venas de la cara y le dice, “que coño dices si siempre vamos por ahí…tu nos estas intentando timar”…y Zas!!! al taxista se le cruza el cable y empieza la conversación de loco solitario, en plan “yo no soy pesetero…,si quisiera robar, robaría un banco…no unos putos euros…a mí el dinero me da igual… sois mala gente que solo pensáis en el dinero…”
Polaris y yo flipándolo…A mi se me hincharon no solo las venas de la cara sino las pelotas y me empecé a poner muy nervioso…

Al final nos dejo en casa, nos descontó dos euros, y le dio un portazo al maletero de su coche de la hostia…resumen…yo otra vez lo mato.

martes, 25 de noviembre de 2008

Ser un buen jefe...

Cada día me sorprende más mi empresa, y es que tiene una gran carencia en cuanto a “jefes” se refiere.
El principal problema es que la mayoría sencillamente ha llegado a esos puestos no por sus logros profesionales sino por los personales…

De esta forma tenemos jefes que sencillamente no saben dirigir, ni mucho menos mandar…lo peor es que los que estamos abajo tenemos que sufrirles o en muchos casos no sufrirles y saber de ellos solo cuando las situaciones son límite.

Seguro que en vuestras compañías os encontráis a menudo con estos elementos, la paciencia es algo que se pierde en seguida, en estos tiempos tenemos que comernos el orgullo y aguantar en la silla, pero si por mi fuera, si por mi fuera…En fin como se dice, todo tiene un San Martin…

Para todos estos “jefes” les aconsejo que piensen que da igual como han llegado a su puesto, pero sólo por el bien de tus empleados, sean profesionales, no es tan difícil, millones lo somos en otros puestos, sólo aplicaros el cuento:

Decálogo del buen jefe

  • Fijar objetivos claros y relevantes
  • Elogiar el trabajo bien hecho
  • Corregir sin humillar
  • Saber escuchar
  • Dejarse aconsejar
  • Ayudar, estimular y, si es necesario, colaborar en el desarrollo del trabajo
  • Mostrar cercanía y respeto en el trato personal
  • No perder el sentido del humor
  • Dar ejemplo: trabajar con la misma calidad que se exige
  • Controlar el seguimiento de los encargos

Y de regalo un consejillo de la escuela de negocios IESE:

«Un buen jefe tiene que ser, ante todo, buena persona. Es muy importante que tenga suficiente sensibilidad para conocer la evolución natural de cada colaborador. Los directivos deben asumir las responsabilidades que les han confiado delegando cuando es necesario y dirigiéndoles cuando sea preciso. Además de la competencia a nivel técnico, el jefe debe saber gestionar un equipo de profesionales combinando las dotes de diplomacia con el sentido del humor»