Pero cada vez que tenía que frenar las pasaba canutas y tenia que cargar todo mi peso sobre el pedal para que coche se detuviese... con el tiempo mi pierna derecha se quedo sin fuerzas...acartonada.
Y a todo esto empezamos a subir el puerto de montaña de somosierra, yo temblaba sólo pensando en la bajada, le dije a Polaris, “oye creo que no hago mucho deporte últimamente y siento que me quedo sin fuerzas por eso me cuesta frenar el coche”, tras cinco minutos de debate sobre mi lamentable estado físico, acordamos que haría mas deporte las semanas venideras, del coche acordamos que estaba bien y no había problemas.

Ya entrando el la capital aquello no frenaba una mierda, y con caravana, peor. Con lo cual mi paciencia estallo y le dije, Polaris este coche no frena una mierda, cuando lleguemos a casa lo compruebas... que parezco paranoico y lo probó y aquello no frenaba y al taller.El mecánico nos dijo que se había picado el tubo del liquido de frenos con lo cual entraba aire en el sistema de frenos.